Especialistas del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas de España, en colaboración con investigadores catalanes, pusieron a prueba un tratamiento que actúa sobre los genes y que, aplicado en animales adultos una única vez, consigue de manera segura alargar la vida media de los individuos.Diversos estudios científicos demostraron que actuando sobre distintos genes es posible alargar la vida media de organismos de numerosas especies, incluidos mamíferos.
Hasta ahora, este tipo de investigaciones obligaba a modificar permanentemente los genes de los animales desde la fase embrionaria, algo que no se plantea en humanos. Sin embargo, la terapia génica desarrollada por el centro para combatir el envejecimiento ha sido probada en ratones adultos de uno y dos años, y tuvo un sutil efecto “rejuvenecedor” sobre ellos.
El trabajo, publicado en EMBO Molecular Medicine, fue desarrollado por investigadores del instituto español en colaboración con Eduard Ayuso y Fátima Bosch, del Centro de Biotecnología Animal y Terapia Génica de la Universidad Autónoma de Barcelona, informa EFE.
Los ratones de un año vivieron, de media, un 24% más y los de dos años, un 13% más, pero además, la terapia mejoró sensiblemente su salud, retrasó la aparición de enfermedades asociadas a la edad y mejoró algunos indicadores de envejecimiento, como por ejemplo la coordinación neuromuscular.
Nueva terapia
La terapia consiste en tratar al animal con un virus cuyo ADN ha sido modificado: sus genes virales han sido sustituidos por uno de los genes más importantes para el envejecimiento: el que codifica la enzima telomerasa.
Los telómeros son estructuras que durante un tiempo limitado protegen los extremos de los cromosomas: con cada división de la célula se acortan y reducen hasta que ya no pueden desempeñar su función, con lo que la célula deja de dividirse y envejece o muere. La telomerasa frena este efecto, reconstruye los telómeros y “resetea” el reloj biológico de la célula.
Por su parte, el virus con el ADN tratado e inoculado en el animal actúa como un vehículo (vector) que deposita el gen de la telomerasa en las células.
“El envejecimiento hoy no se considera una enfermedad, pero cada vez más los investigadores tendemos a verlo como la causa común de enfermedades como la resistencia a la insulina o las cardiovasculares, cuya incidencia aumenta con la edad. Si tratáramos el envejecimiento de las células, prevendríamos estas enfermedades”, explica la directora del CNIO, María Blasco.
“El objetivo es hallar, a través de esta terapia, un medicamento contra el cáncer”, señala Blasco.
Contra el cáncer
Oncología Los investigadores del CNIO señalan que los ratones tratados con la nueva terapia antienvejecimiento tampoco tienen cáncer. Lo atribuyen a que la terapia se inicia cuando ya son adultos y, por tanto, no tienen tiempo de acumular el número de multiplicaciones aberrantes necesarias para que aparezcan los tumores.
Terapia Aunque a corto plazo la terapia ensayada no sea aplicada a humanos contra el envejecimiento, sí puede abrir una nueva vía al tratamiento de enfermedades relacionadas con la presencia en las células de telómeros anómalamente cortos.
Futuro Los investigadores se hallan abocados a la lucha contra el cáncer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario