De padre holandés y madre boliviana, Antoinette Van Dijk es la modelo internacional que ocupa un distinguido lugar en la historia del modelaje boliviano.
Durante su carrera como modelo ha logrado conseguir lo que otras modelos bolivianas todavía sueñan; una exitosa carrera internacional, imagen de las marcas y revistas más reconocidas del mundo y la admiración de todo un país.
Antoinette, con su sencillez y belleza exótica que la caracteriza, fue elegida por el grupo de inversionistas Paz Rojas para ser imagen de una de las firmas más importantes de cerámica y productos de construcción.
Bajo la dirección creativa y arte de Felipe Zabala, la mirada crítica y artística del fotógrafo Rubén Darío, el equipo de producción de Carlos Pardo y los arquitectos de Incerpaz, se logró elaborar un calendario sensual y elegante, de conceptos minimalistas.
Todo el equipo, incluyendo al diseñador Rafael Díaz, Chicho Rojas en el maquillaje y Cristian Ledesma en el peinado, trabajaron por más de cuatro meses para superar sus propias expectativas, dijo el director creativo, Felipe Zabala.
Van Dijk afirmó estar satisfecha con el trabajo y el concepto de la industria de cerámicas, ya ella misma exige calidad como modelo internacional.
Reconoció que tuvo momentos de inseguridad como mujer, porque tres meses antes había dado a luz a su hija Carlota, que ahora tiene 8 meses.
Una modelo internacional
ComenzÓ a trabajar como modelo cuando tenía nueve años, en un spot televisivo. A los 17 viajó a Europa para internacionalizarse. Llegó a participar en Cibeles (Madrid Fashion Week), se lució en las páginas de varias revistas de moda internacionales como Elle, Caracter, Glamour, Vanidad, Cosmopolitan, Vanidades, Surface. También fue imagen de Pepsi Light a nivel mundial y de la campaña Quick Silver y Tem Tailor, entre otros
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