miércoles, 10 de abril de 2013

6 efectos nocivos de la pornografía

Películas, videos, fotografías, revistas e incluso juegos XXX o pornográficos están a simple disposición en el mercado y, por ende, dispuestos para cualquier público, "sin distinción de edad", aclaran algunos padres, cuyos hijos adolescentes fueron con un billete de Bs 10 y adquirieron su propio CD con películas eróticas. Pero, ¿qué tiene de malo mirar imágenes pornográficas? La respuesta es: "son nocivas". Por qué, siga leyendo y lo entenderá.

Desinformación. La pornografía en la adolescencia "crea una distorsión de la sexualidad por la mala información que esta brinda", aseguró el psicólogo Óscar Urzagasti. El profesional puso como ejemplo las exageraciones en las imágenes que muestran sobre el tamaño del miembro masculino, "que puede crear una mala expectativa en un muchacho en plena adolescencia, sobre su propio cuerpo", apuntó.

Masturbaciones. Urzagasti destacó que el consumo de pornografía en plena adolescencia puede crear conductas masturbatorias, "pero con una mala viabilización". Según el psicólogo, la masturbación no es mala, siempre y cuando se realice en el marco permisible, ya que todo en exceso es malo.

Desviaciones. Para el psicólogo, la pornografía puede ser una causa para las desviaciones, "pero no la única". Además, indicó que las imágenes eróticas pueden llegar a ser una herramienta de socialización errada con la sociedad.

Promiscuidad. Las imágenes que se muestran en revistas, videos a través de la Internet o en celulares "muestran relaciones de parejas no convencionales que no muestran ningún tipo de respeto", destacó el psicoanalista Fernando Maestre.

No a los anticonceptivos. El problema es que la mayoría del contenido no trata acerca de los riesgos o peligros y responsabilidades del comportamiento sexual con la pareja. "Los adolescentes y niños expuestos a dichas películas solo ven el sexo como un acto exagerado y no reciben ningún contenido sobre prevención de embarazo y enfermedades de transmisión sexual", remarcó Maestre.

Disminuye la líbido. La pornografía a la larga puede disminuir la felicidad sexual de una persona. Según investigaciones realizadas, se conoce que "las personas que estuvieron expuestas a la pornografía no violenta, informaron una menor satisfacción con la apariencia física, el afecto, la curiosidad y el desempeño sexual de su pareja", apuntó el psicoanalista. También estaban más inclinadas a asignar una mayor importancia al sexo, sin un compromiso emocional.

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