Corría un fatídico 16 de agosto del ´77, cuando Elvis Aaron Presley o más conocido como “el Rey”, ultimaba algunos detalles para una nueva gira de conciertos que preparaba por los Estados Unidos cuando sin ningún síntoma previo, mientras descansaba, se lo encontró inconsciente en su habitación y por muy rápido que fue el traslado al hospital, todo fue inútil… horas después fue declarado muerto.
Con una mezcla de muchos ritmos en sus producciones musicales, su pionera forma de bailar y tocar la guitarra y una voz capaz de enamorar a la más insensible, Elvis conquistó el mundo entero durante algunas décadas hasta su partida. Muchos de sus fanáticos más acérrimos se niegan a aceptar su partida y urden teorías como que fue abducido por una raza alienígena o que vive en la clandestinidad. Sea como fuere… larga vida al Rey.
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